Renault Trucks Magnum, el alma del Lejano Oeste

·  Un post de Míriam Ballesta
Tiempo de lectura: 8 min.

A esta película la podríamos titular: “El Bueno (por Clint Eastwood), el Feo (por John Wayne) y el Rubio (por nuestro protagonista del decorado del mes)”. Sirva este pequeño homenaje para explicar la gran afición de Miguel Casado, un conductor madrileño que hace unos años decidió trasladar su admiración por estos dos genios del western americano a los laterales de la cabina de su Renault Trucks Magnum DXi12.

Clint Eastwood siempre ha sido un hombre duro y a mí, desde pequeño, siempre me han gustado sus películas del Oeste, y las de ahora también. Y de John Wayne lo mismo; es un actor que me ha causado sensación”.

Miguel o Flequi, comRenault Trucks Magnum Westerno le apodan algunos amigos por su inconfundible flequillo, era de esos niños que se ponían delante del televisor a devorar las películas que se emitían los fines de semana. Y de entre todas, las que más le influyeron fueron las de pistoleros. “Entonces era lo que había”.

Pero su padre, que fue quien le legó las pasiones del camión y del cine, considera que el éxito de este género en su casa, como en otros muchos hogares españoles, no sólo se debió a que estaba de moda en los 80. “Ahora nos haría falta eso, que alguien persiguiese al malo y protegiese al bueno. Más que nada es un símbolo. Normalmente estos actores defendían los valores de lo que está bien y de lo que está mal, que yo a mi hijo se los inculco y creo que habría que inculcárselos a toda la gente”.

No le duelen prendas en reconocer que también le había picado el gusanillo por los decorados que había visto en Solo Camión, aunque aún faltaba la Renault Trucks Magnum Westernmano para ejecutar la idea en toda su complejidad. A base de contactos y telefonazos, dio con la persona perfecta: Julio César.

“No le di ningún boceto. Sólo le dije que quería a Clint Eastwood con el cigarro en la boca, con la cara conocida que tenemos todos de él; y John Wayne, igual. Su padre, que es el titular de Trans. Paular, no puso ningún pero, ya que el decorado no rompía para nada la estética de esta empresa familiar.

“Le aconsejé que fuese una cosa discreta. No es que no me guste esto, pero lo normal es que lo haga alguien que tiene un camión para él solo y se lo personaliza. Dentro de una empresa como ésta, tenemos que mirar la imagen con más cuidado”.

De esta forma, el Renault Trucks Magnum de Miguel pone el toque de distinción a la flota de cinco cabezas tractoras con la que cuenta Trans. Paular. Ninguna otra puede competir en términos de impacto visual con unos retratos que, a media distancia, dan más impresión de haber sido plasmados con la técnica del carboncillo que con un dispositivo neumático de pintura.

La perfección es de tal calibre, que de cerca se puede apreciar hasta el pelo cano en la barba de Clint Eastwood. Asimismo, Flequi sugirió a Julio César que incorporara debajo de sendos bustos el paisaje del Gran Cañón del Colorado, una de las postales típicas del Oeste americano que pone colorido y contexto al Magnum de nuestro transportista.

Más que un hobby

En pocas palabras, la tendencia hacia los vehículos pesados se veía venir. “Cuando era niño, de cualquier cosa hacía un camión, incluso de una caja de zapatos, y me gustaba ir con mi padre en su camión”. Las miguitas de la infancia han madurado y se han convertido en la principal satisfacción de ocio para Renault Trucks Magnum WesternMiguel Casado. Si le preguntas en qué invierte su tiempo libre, te responderá con casi toda probabilidad que reconstruyendo vehículos clásicos junto a su padre.

De hecho, no puede faltar nunca a la cita de los fines de semana en el minitaller que ha improvisado dentro de las instalaciones del concesionario de Guadarrama. “Ahora estoy liado con un tractor inglés Fordson del año 55”. Las manos de padre e hijo también se han dejado notar en turismos -el último ha sido un Ford Capri del año 81- y en camiones como un Avia modelo 4000 del año 72. El próximo en pasar por la camilla será un Barreiros de recogida de leche con cisterna.

Mi padre, o sea su abuelo, y sus bisabuelos”, nos relata Miguel padre, “ya tuvieron camiones”. “Mi hijo es la cuarta generación. Nada más terminar la guerra civil, mi padre tuvo un Dodge “vaca flaca” que llamaban, y un Dodge Brother que tenía motor de gasolina. Los trajeron de Inglaterra para la guerra y, como sobraron, hubo gente que los compró”.

La ligazón con el mundo del camión se ha ido perpetuando de unos a otros hasta germinar en una empresa de transportes que hace gala de sus orígenes en todas sus cabezas tractoras. “El nombre de Trans. Paular viene de Santa María del Paular, prosigue el padre al tiempo que señala los caracteres de la visera del Renault Magnum. “Es un monasterio que hay en Rascafría y, como yo he vivido allí mucho tiempo y he tenido mucha relación con el pueblo, incluso en los primeros años me dediqué al transporte en la fábrica de quesos de los monjes benedictinos, quería tener esta muestra de gratitud y de respeto hacia ellos”.

Renault Trucks Magnum WesternPor tanto, en el cuerpo de este camión confluyen símbolos del pasado, del entretenimiento y otros puramente estéticos que cumplen una función embellecedora de arriba abajo. En este último saco metemos las pegatinas country de Renault Trucks que adornan la esquina inferior izquierda de las ventanas, las cortinas azules con cierto sabor añejo, la luz de neón que ilumina el interior de la cabina en horario nocturno, las llantas cromadas de acero inoxidable en las ruedas de tracción y los pilotos instalados en línea a lo largo de la parte inferior de ambos laterales.

De momento, Miguel hijo no va a tocar más su Magnum de 480 CV, aunque si le tocara el Gordo del Niño sabe muy bien lo que haría con ese dinero: “Pondría una defensa delante; tapizaría la cabina por dentro de guata, que es como se tapizaban antes los camiones; y quizás haría otro dibujo de Marilyn Monroe o de otro actor famoso de cine”.

Arrimando el hombro

Con una borrachera de euros de esas características, seguramente se fulminarían de un disparo los problemas que está padeciendo Trans. Paular debido a la crisis emponzoñada en el sector de la construcción. “Yo calculo”, augura en su condición de veterano el fundador de Trans. Paular, “que sobra un 50 % de los Renault Trucks Magnum Westerncamiones que hay en España, y lógicamente tienen que desaparecer o bien parándolos o bien vendiéndolos a otros países. Viene una fuerte reconversión en el transporte y en todo el sistema de producción, porque España ha parado de consumir, y esto no se va a reactivar de la noche a la mañana”.

A todas luces, vivimos momentos que invitan y, en muchos casos, fuerzan a la épica, un componente muy presente en el género del western y en títulos como “El Dorado”, “La diligencia” o “Los cuatro hijos de Katie Elder”. Hoy en día, el siglo XXI está poblado de pequeñas historias y pequeños héroes como Miguel, que, amén de ayudar a su padre en el día a día, ha estrenado paternidad -tiene dos hijas, Rosa e Isabel, de 14 y 2 meses respectivamente- en Renault Trucks Magnum Westernpleno vendaval económico.

Con una fe inquebrantable en los camiones Renault Trucks, ya que “nunca me han dejado tirado”, Miguel Casado se despide de nosotros con el aire bonachón que le precede y que, a juzgar por las apariencias, no tiene nada que ver con la pose un tanto salvaje y presuntuosa del Rubio, cazarrecompensas interpretado por Clint Eastwood en “El Bueno, el Feo y el Malo”.

A simple vista, lo único que los une es la dorada tapadera. “No te vayas a creer que me pongo música tejana en el camión…”, musita cómicamente al preguntarle por su nivel de fanatismo. Como muestra de ello, ya se ha topado con alguien más incondicional que él: “En Zaragoza fui a descargar a una industria del papel y el chaval que me descargó era muchísimo más fan que yo.

Tenía todas las películas de Clint Eastwood, desde que empezó hasta las últimas que ha hecho. Se quedó encantado; sacó fotos al camión y todo…”. Por fortuna, el western sigue vivo en la retentiva de muchos cinéfilos, en la melodía inmortal firmada por Ennio Morricone y en la carrocería de un Renault Trucks Magnum.

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